Si cada vez que haces la colada temes que el vecino de abajo suba a tu casa a quejarse del ruido, tienes un problema. Y no con el vecino, que también, sino con tu lavadora. Puede que el fallo sea una simple cuestión de inestabilidad que se regula fácil, pero el problema puede ser más serio. Vamos a explicarte a qué pueden deberse esos conciertos que se organizan en tu lavadero y cómo evitar el ruido de la lavadora. Quizás, después de todo, se corrija con un poco de mantenimiento…
¿Por qué hace tanto ruido mi lavadora?
No seas demasiado estricto con esto. El ruido forma parte del ciclo de la lavadora, aunque el mercado actual nos ofrezca electrodomésticos ciertamente silenciosos. Tendrás que preocuparte cuando la lavadora haga un ruido poco habitual o la vibración provoque que el aparato se desplace o dé saltos. Puede estar mal instalada, tener alguna pieza suelta o, simplemente, estar desnivelada.
Veamos, entonces, algunos trucos para el mantenimiento de tu lavadora y evitar ese ruido.
Evita que la colada suene como un concierto de rock
Son varias las causas por las que tu lavadora hace ese ruido infernal:
¿Está bien nivelada? Si la vibración es excesiva durante el ciclo y la lavadora da saltitos y golpes en el suelo, puede estar desnivelada. Puedes estabilizarla con las patas de la parte inferior. Suelen ser a rosca y es una operación sencilla.
Si se oyen ruidos de agua, puedes tener una pequeña fuga o una válvula mal regulada. Observa que no haya agua en el suelo, revisa los dobleces en la goma de entrada y el desagüe y regula la presión con la llave de paso. Si el problema persiste, acude a un técnico especializado que le dé solución.
¿Concierto de rock en el centrifugado? La configuración de la lavadora es fundamental para evitar ruidos. Quizá tengas las revoluciones muy altas (se pueden disminuir fácilmente siguiendo las instrucciones del aparato) o se haya metido algún objeto en el tambor. ¡Nunca metas la ropa sin comprobar los bolsillos!
Si lo anterior no te ha servido para reducir el ruido de tu lavadora, puede que el problema sea grave y haya alguna pieza suelta o rota en el aparato. Una empresa de reparación a domicilio será tu mejor ayuda, sin duda. Pero recuerda no dejarlo pasar mucho tiempo… ¡por el bien del vecino de abajo!